Lo que parecía una tediosa jornada laboral de hora pico en medio de un mar inerte de vehículos con motores encendidos, pero sin movimiento, terminó en tragedia para el conductor de una camionetilla blanca que se desplazaba en la zona 5 de la Ciudad de Guatemala.

Verdaderos minutos de drama se observaron en medio del estancamiento vehicular cuando los socorristas intentaban traer de regreso del valle de las sombras a un hombre en estado inconsciente.

Según el triste relato de Mynor Ortega, compañero de trabajo del desafortunado finado, el hombre comenzó a quejarse desde temprano (sentía mareaos y un intenso dolor de cabeza). No obstante, su sentido de responsabilidad o más bien el hecho de que la necesidad tiene cara de chucho, lo hizo hacer a un lado el sufrimiento que traía e ir a la empresa a cargar el producto que se encargarían de repartir durante el transcurso de la mañana de este funesto jueves.

Llegando a la 12 avenida sobre la 32 calle Mariscal Cruz, el conductor no pudo más, el dolor en su pecho se hizo insoportable y detuvo la marcha, su compañero aterrorizado salió despetacado a pedir auxilio. Las imágenes son inquietantes y conmovedoras.

Más o menos así fue la última jornada laboral del finado piloto quien fue identificado como Jerónimo Villeda a quien se le calculan unos sus 55 años.