Hoy la fiscalía contra la corrupción del Ministerio Público hizo diligencias de allanamiento en distintos chantes ubicados en la Ciudad del Futuro, con el propósito de enhebrarse bien y bonito a tres tristes trepadoras sociales, almas inocentes —hasta que se demuestre lo contrario— que, según la investigación, hicieron su agosto (más de 400 mil pajarracos verdes de pecho rojo) en el Ministerio de Salud, aprovechando que breteaban en el Programa nacional de prevención y control de infecciones de transmisión sexual, VIH y Sida.
Según parece, Silvia Lucrecia Ríos Carrillo, Ericka Patricia Soto Zepeda y Brenda del Rosario Morales García, eran buenas fusilando firmas y documentos para embucharse reactivos y medicamentos carísimos provenientes de las bodegas del Programa en el que trabajaban. Asegún el MP, estas querubincitas del infierno hacían su marufia emulando que el Hospital Roosevelt solicitaba dichos insumos. ¡Astutas como cerdos!