En 2019 no fue posible la conclusión final y apropiada del proceso de elección de magistrados y magistradas para las altas cortes del Organismo Judicial, provocando con ello que quienes fueron elegidos en 2014 continúen ocupando esos puestos, con los sabidos resultados obtenidos en muchas de sus resoluciones.

Para el siguiente proceso, que seguramente será en 2024 es imprescindible que desde este momento se establezcan los mecanismos legales que permitan un adecuado proceso, de tal forma que no vuelva a presentar el inconveniente que el país está viviendo y que genera que un aspecto tan importante como es la certeza jurídica quede en tela de duda, debido a que muchos de los que siguen decidiendo sobre la libertad o los bienes de las personas no debieran estar ocupando esos puestos.

Silvia Patricia Valdés Quezada, magistrada presidente del Organismo Judicial.

Las condiciones de 2019 en lo esencial siguen siendo las mismas, han cambiado en algunos pocos detalles y la mayoría de forma, eso provoca dudas acerca de la forma en que se producirá la elección de quienes dirijan la Corte Suprema de Justicia (CSJ)  y las Salas de Apelaciones.

Al hablar de condiciones similares, me refiero a que grupos de poder se están movilizando para tener mayor control de la CSJ y las salas de apelaciones durante el periodo que se prologará entre 2024 y 2029.

Entre los cambios que se han producido se encuentran:

El Consejo de la Carrera Judicial fue objeto de un proceso mediante el cual pasó a convertirse en un ente administrativo del Organismo Judicial que ahora está dependiendo directamente de la presidencia de la Corte Suprema de Justicia, esta situación podría provocar que las acciones del Consejo tengan menos impacto y credibilidad en el momento de calificar a quienes forman parte de ese organismo del Estado y que pretendan optar a un puesto a través de la postulación.

Aunado a lo anterior, existe el inconveniente que por renuncia o por diversas razones ya no están en funciones la totalidad de los 13 magistrados que tomaron posesión en 2014, para estos momentos son diez, ello hace pensar que podrían presentarse las condiciones para cualquier impugnación debido a interpretaciones de la Constitución o la Ley de Comisiones de Postulación.

Señalo al menos dos aspectos de los que preocupan, aunque hay más que iré tratando en columnas futuras. En todo caso no se debe descartar el escenario en el cual los actuales magistrados se queden un periodo más ocupando esos cargos.